El bochornoso caso Unai, del Paraguay

Seguimos en la linea de la estupidez mas estúpida, no darnos cuenta de que con el pensamiento que ultimamente exponemos damos mas risa que cualquier atisbo de seriedad, quiere alguien decirme ¿ que ha ganado el nervioso, convulso, cuenta cuentos y enjuto Unai con el Valencia c.f? solo una cosa, lograr que perdiéramos la Supercopa contra el Real Madrid, bueno, contra el equipo blanco no, contra 9 de sus jugadores, hay empezó el descalabro de este entrenador dando una imagen de " entrenador" segundon con una L en la espalda muy manifiesta, la siguiente tiene guasa, en los 91 años de historia del Valencia c.f jamas en toda nuestra historia habíamos hecho una peor segunda vuelta, solo con estas dos fatídica anécdotas es mas que suficiente para que el " señor aprendiz de brujo" deje el banquillo del Valencia c.f, para poder fichar a un entrenador que entienda y sepa que club esta entrenando, no por sus dirigentes o por la prensa Rosa deportiva que " pulula" por esta ciudad, si no por la gente que tiene en su corazón el escudo Valencianista, para eso tenemos que hacer bien las cosas desde el inicio de la próxima temporada y también desde el tiempo que nos concede la liga en su parón estival.

Unai es el resultado de infinitas meteduras de pata por parte de quienes han tenido la oportunidad de poder tener capacidad de mando en el Valencia c.f, Soler, Soriano ahora el Ínclito Manolo Llorente, Unai es el descalabro personificado de un club tocado y casi hundido donde muchas ratas intentan salir por que temen por sus intereses personales y profesionales, no podemos tener gente " inverbe" en el conocimiento de como se tiene que gestionar un club, no podemos tener aprendices con trajes de Armani y conocimientos de la E.SO en materia futbolistica, no podemos tener viejas glorias llevando el apartado deportivo cuando en su propia carrera como futbolista jamas aspiro a nada, si , solo a una cosa, a subir a primera division cuando nos bajaron por indolentes he inoperantes, no se puede tener a gestores economicos como Javier Gomez, que entiende muy bien que es lo que tiene que cobrar por su trabajo pero no entiende también que significa el Valencia c.f como entidad social y cuales son las metas de un club de su tamaño, quizas no se de la talla para determinados fines económicos.

Actualmente con este entrenador, con estos acomodados, indolentes, de dudosa profesionalidad, algunos jugadores vividores convulsos, otros que negocian hasta con el diablo por pactar prebendas personales, otros ya tienen medio hecho sus contratos futuros con equipos con mas enjundia que el nuestro ¿ por que? pues por que somos el equipo simpático de la liga que nunca aspira a nada, que hace reír y siempre tiene la " fatalidad" de hacer que todo salga a pedir de boca a quienes les interesa en algún momento algo eminentemente necesario, que un equipo esta en zona de descenso allí llega el Valencia c.f, hace el ridiculo y les regala 3 puntitos de oro, que casos " horribilis" como el ultimo partido contra el Real Madrid, bochornoso, necesitaba los 3 puntitos y salimos como si de un pase de modelos se tratase y les regalamos los puntos de forma ruin y desvergonzada, luego sesión de besos y abrazos y todo solucionado ¿ asi como queremos estar en Champions y en otras milongas? mas profesionalidad y mas vergüenza torera.

Por ultimo y final, estoy hasta los moños de discursos fáciles, estandarizados, de una cierta vehemencia patológica, de que nos tengan que decir si tengo que ir a Mestalla pero antes me tengo que comer un bocadillo de calamares o si tengo que reapretarle el culo a mi novia por parte de los medios de desinformacion de esta ciudad, si tengo que apoyar lo haré por mis propias creencias y reflexiones, si no voy a Mestalla no soy ningún proscrito ni ningún antivalencianista, solo se trata de dignidad, palabra que algunos periodistas ni la conocen o no pasa por su ideario personal, demasiados " tripas dules" Revienta baúles" Nalgas tunas" y " cabezas canasta " circulan por esta ciudad, zotal, mucho zotal necesita esta ciudad.